No hay felicidad sin bienestar, y no hay bienestar que dure mucho si nos olvidamos de nuestro cuerpo.

El camino a la felicidad pasa por reconocer las necesidades de nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestras emociones. Y mantenerlas atendidas.

Recuerdas cómo está un bebé mojado, hambriento o con sueño?

Ese bebé y esas necesidades siguen estando en nuestro interior.

O le hacemos caso o no hay felicidad

PONLE POCAS CONDICIONES

Si te levantas animado y con ganas de hacer cosas, seguro que has descansado bien. Te vas a a cocina y te preparas un buen desayuno que te da energía para afrontar las tareas. Te apetece vestirte y piensas con ilusión qué te vas a poner y qué ropa necesitas este día. Vives el día, vives el momento, sin estar pensando en otra cosa que pertenece a otro momento y otro lugar.

Puede ser que te gusten más los días de sol que los de lluvia, pero si aceptas lo que hay, lo que sientes y lo que experimentas, como algo que es necesario para la vida, lo podrás disfrutas.

Atender lo que va surgiendo, fluyendo con los sucesos y los cambios, sin apegos ni rechazos. Llegan y pasan. Disfrutamos lo que nos gusta y lo demás aprendemos a tolerarlo con calma.

NECESITO VACACIONES CADA DÍA

Necesito vacaciones pero no solo una vez al año, dos o tres. Las necesito cada día.

Acumulo estrés, objetivos, actividades, un cansancio que no detecto siquiera hasta que me tumbo en el sofá o la cama.

Si no suelto el estrés, se va acumulando, empiezo a dormir poco y mal, lo normalizo.

Empiezo a soñar con tener vacaciones mientras sigo con todas las tareas, pasando de una a otra sin darme tiempo a pensar si me ha gustado.

Vivo con la cabeza en un sitio y el cuerpo en otro, de forma neurótica. Mala cosa.

ESTRÉS Y OTROS INCONVENIENTES

El estrés me permite afrontar una situación nueva, que me requiere una actividad especial y afrontar los miedos.

Ese estrés es necesario y sano si dura unas horas. Si se vuelve crónico, nos enferma.

La gente de las cavernas iba a cazar. Se preparaban, cazaban, y volvían. Comían y descansaban.

¿Les copiamos? Presencia en lo que hacemos, la cabeza y el cuerpo en la misma tarea y después o al final de día ¡vacaciones! Hasta el día siguiente.

ES SUFICIENTE POR HOY

Sí, necesito descansar y reponerme.

Para dormir bien necesito soltar primero la mochila de tareas que he llevado todo el el día. Y apuntar en una libreta lo que tenga miedo de olvidar. Eso ya me da un sueño más profundo. Que el cansancio del día no sea mi compañero de cama.

Necesito sentir el cansancio, es algo bueno. Puede que aparezca cuando me relajo y me asuste. Ya no suelo sentirlo de lo acelerada que voy.

Pero me permite soltar la tensión muscular y relajar la respiración. Y podré llegar a disfrutarlo. Significa tarea hecha, soy útil, hago un buen trabajo, valió el esfuerzo,…

Necesito sentir el bajón de haber acabado las tareas del día, y que ya no tengo nada más por hacer.

¡Es suficiente por hoy! Mañana será otro día.

Necesito soltar la actividad (sistema nervioso simpático) para permitir que mi cuerpo se pueda relajar y recuperarse de ese cansancio (sistema nervioso para simpático).

Si no paro, si no descanso, no estoy permitiendo que mi cuerpo se recupere, y se mantenga sano.

Necesito vacaciones cada día.

Necesito sentir mi cuerpo cada día

Necesito reconocer mis emociones cada día.

Necesito vivir en el presente aquí y ahora

LAS CUATRO HORMONAS DE LA FELICIDAD

Mi cuerpo con millones de años de evolución sabe mejor que yo lo que necesita para vivir y ser feliz:

  • La serotonina: se activa haciendo ejercicio y en el contacto con la naturaleza.
  • La oxitocina: se activa cuando reímos, y damos besos y abrazos.
  • La endorfina: se activa cantando y bailando
  • La dopamina: con un sueño reparador de 6-8 horas.
Abrir chat
¡Hola! ¿En qué te puedo ayudar?...
Puedes conectar conmigo a través del WhatsApp